Introgresión genética en trucha común
Información del estudio
Finalizado
Año de inicio:
2020
Año de finalización:
2022
Entidades:
CISE - PNSG | Área de Conservación de Flora y Fauna (CM) | MNCN-CSIC
Financiación:
Comunidad de Madrid - Parque Nacional
Programas:
A finales del siglo pasado, en España se llevaron a cabo políticas de repoblación de ríos trucheros con especímenes de trucha común (Salmo trutta) procedentes de piscifactorías. En general, estas piscifactorías se nutrieron principalmente de distintas etapas de desarrollo de truchas comunes procedentes del centro o norte de Europa. En la Sierra de Guadarrama constan numerosas repoblaciones cuyas consecuencias fueron, por tanto, negativas, máxime cuando se comprobó la hibridación entre las dos variantes genéticas, la autóctona y las de origen del centro y norte de Europa.
En consecuencia, para conocer el grado de introgresión, se ha elaborado un “mapeo” genético en un total de 162 individuos de trucha común, en los ríos y arroyos de la sierra de Guadarrama, con especial atención en los tramos trucheros del parque nacional y su zona periférica de protección.
Objetivos
- Conocer el grado de introgresión genética en la trucha común en la sierra de Guadarrama.
- Determinar los cursos fluviales sin introgresión, con poblaciones estrictamente autóctonas, como base de un proyecto de mejora genética de las poblaciones de trucha común.
Metodología
Los análisis genéticos se han realizado a partir de un fragmento de aleta adiposa de trucha común (Salmo trutta). Se han capturado mediante pesca eléctrica, liberándose inmediatamente de nuevo al curso fluvial, tras la recogida del fragmento de aleta.
El número total de muestras ha sido de 162, correspondientes a ejemplares de trucha común de 15 cursos fluviales de la sierra de Guadarrama. La muestra se conservaba inmediatamente en etanol absoluto. En un primer trabajo, año 2020, se caracterizó el río Lozoya en 8 tramos diferentes, en un total de 79 individuos de trucha común. Hay que mencionar que estos tramos se concentraron en unos 3 km de río, con el objetivo de obtener una alta resolución genética de este tramo de río. En un segundo trabajo, realizado a lo largo del año 2021, se decidió obtener un mapeo genético más amplio, evaluando genéticamente 83 individuos de trucha común en 15 cursos fluviales diferentes de la sierra de Guadarrama.
Mapa del muestreo de trucha en el Rio Lozoya
Las extracciones, amplificaciones y digestiones de ADN se han realizado en el laboratorio de Sistemática Molecular y Genética de Poblaciones del Museo Nacional de Ciencias Naturales mediante el kit DNeasy Blood & Tissue (Qiagen). Se amplificaron las regiones de interés por PCR, y así se analizaron dos marcadores moleculares: la región control del ADN mitocondrial (D-loop) que permite seguir los linajes maternos, es decir, su origen, ya que no hay recombinación en este marcador; y el gen LDH-C1, gen que codifica para la enzima lactato deshidrogenasa. Con este marcador obtenemos información sobre los dos parentales, al tratarse de un gen nuclear. El alelo autóctono es el que se denomina 100 y el foráneo el 90.
Resultados
Los resultados del río Lozoya, relativos al ADN mitocondrial (D-loop), como indicador del origen de cada individuo, mostraron que 7 individuos presentan un origen mitocondrial foráneo de los 79 individuos analizados, lo que representa un 8.86%. En cuanto al marcador nuclear (LDH-C1), procedente de los dos parentales, la frecuencia del alelo 90 (foráneo), en el río Lozoya es del 4.43%. Sin embargo, observamos que hay siete individuos que presentan un genotipo heterozigótico, es decir, tiene un alelo de cada tipo (90/100). Esto indica que uno de los parentales presentaba un alelo autóctono (o dos) y el otro uno foráneo (o los dos). Estos siete heterozigotos se reparten en distintas localidades del río Lozoya.
Por otro lado, es destacable el haplotipo denominado "Duero", más propio de trucha de la cuenca del Duero, que representan el 46.8% de los ejemplares de trucha caracterizados en el río Lozoya. Seguidamente el haplotipo “Atlántico Sur” (propio de la cuenca del Tajo) fue del 44.3%.
Los resultados en 15 cursos fluviales de la Sierra de Guadarrama (n=83), relativos al ADN mitocondrial (D-loop), se obtuvieron 9 individuos que presentan un tipo mitocondrial foráneo entre los 83 individuos analizados, lo que representa un 10.84%. En cuanto al marcador nuclear, (LDH-C1), que se obtiene información sobre los dos parentales, observamos que hay 10 individuos que presentan un genotipo heterozigótico, es decir, tienen un alelo de cada tipo (90/100) y 2 homozigotos para el alelo foráneo (90/90). Esto indica, en el primer caso, que uno de los parentales presentaba un alelo autóctono (o dos) y el otro uno foráneo (o los dos).
Estos 12 individuos se reparten de forma desigual en las distintas localidades. De hecho, solamente aparecieron en cinco de las 15 localidades analizadas: Peñalara, Navalmedio, del Mediano, Manzanares y Canencia. En dos de estas localidades (Navalmedio y del Mediano) fue donde se encontraron los dos homozigotos para el alelo foráneo (90). Lo que indica un mayor grado de introgresión. De esta forma, se encontró un cierto grado de introgresión a nivel del marcador nuclear, que varió, en los cinco cursos fluviales antes citados, entre un 12.5% (Manzanares) y 42.86% (Navalmedio).
En cuanto a los haplotipos presentes, ya se ha comentado que el 10.8% de los individuos presentaron un tipo “Foráneo”. A diferencia del Lozoya, se ha podido constatar que el haplotipo “Atlántico Sur”, propio del Tajo, asciende al 74.7% (cuando en el Lozoya fue del 44.3%), y el haplotipo “Duero” fue tan solo del 14.5% (en el Lozoya fue el mayoritario con un 46.8%).
Sin embargo, hay diferencias en función del curso fluvial. Por ejemplo, los resultados, mostraron que algunos cursos fluviales, por ejemplo, el Artiñuelo, mostró que el 71.43% fue de tipo “Duero”. Por el contrario, otros cursos fluviales como el Barondillo (n=7), Aguilón (n=2), Madarquillos (n=3), Riato (n=3), de La Puebla (n=3) y Lozoya (n=8), no mostraron introgresión genética, y en todos ellos los individuos determinados genéticamente, son del tipo autóctono “Atlántico Sur”, es decir, propios de la cuenca del Tajo.
Perspectivas
Se pretende constituir un centro de cría en Rascafría, con el objetivo de disponer de un banco reproductores de trucha común genéticamente autóctona, libre de introgresión.
Para saber más:
Fecha de actualización: Marzo 2025