El origen de los hongos letales de los anfibios

Lao CaiEn la actualidad, la introducción de especies es unos de los principales problemas para la biodiversidad. Un buen ejemplo del impacto de las especies introducidas son los hongos patógenos de anfibios: Batratochytrium dendrobatidis (Bd), que ha causado declives poblaciones y extinciones de anfibios de todo el mundo, y Batrachochytrium salamandrovivorans (Bsal), que ya ha causado declives en poblaciones de salamandras en Centro Europa.

En la investigación recién publicada, se han analizado la presencia de  Bd y Bsal en 853 ejemplares de ocho especies de salamandras de 55 localidades de Vietnam. Bsal se encontraba presente en 14 de las 55 localidades estudiadas, infectando a ocho especies, mientras que Bd tan solo apareció en una localidad infectando a una de las especies. Por lo tanto, parece que en esta zona geográfica Bsal se encuentra más ampliamente distribuido, ocupando un nicho ecológico mayor que Bd.

086 02 Paramesotriton deloustaliSin embargo, a pesar de que Bsal infecta a un mayor número de especies de salamandras que Bd en Vietnam, la proporción de ejemplares infectados por ambas especies de hongos resultó ser similar (2.92% y 0.69%, respectivamente). La baja proporción de ejemplares infectados y la ausencia de síntomas de la enfermedad, sustenta la hipótesis de que las dos especies de quitridio podrían ser endémicas del Sudeste Asiático. Estos resultados podrían indicar que las especies de anfibios que habitan en estas zonas han ido coevolucionando junto a estos dos patógenos y, de manera natural, han podido “luchar” contra ellos hasta conseguir un equilibrio en el que éstos no representan una amenaza para sus poblaciones.

Por el contrario, las especies introducidas suponen una amenaza muy seria para las especies autóctonas, que muchas veces no pueden adaptarse a un cambio tan brusco como es la llegada de una nueva especie. Las especies introducidas compiten por los recursos del medio que colonizan, desplazan a las especies autóctonas, deterioran los hábitats y, en el caso de los patógenos, resultan catastróficas para sus poblaciones.

Esperamos que este trabajo sirva para poner de manifiesto, una vez más, la problemática ambiental que supone el movimiento de especies, y que se lleven a cabo medidas de bioseguridad para impedir que los patógenos puedan dispersarse entre lugares alejados del mundo.