Manteniendo a raya al hongo asesino

Desde que se identificó el hongo Batrachochytrium dendrobatidis como una de las principales causas del declive poblacional de anfibios a nivel mundial, hemos puesto en marcha medidas para mitigar sus efectos. Inicialmente parecía que la única solución era mantener colonias cautivas de las especies más susceptibles, como el caso de la población de sapo partero de Peñalara en el Centro de Cría en Cautividad de Anfibios Amenazados de la Sierra de Guadarrama. Este tipo de medidas ex situ, junto con la desinfección de ejemplares en cautividad y el reforzamiento de las poblaciones afectadas, únicamente tienen sentido a corto plazo. El reto ahora es desarrollar medidas in situ, es decir, directamente en el medio en el que los anfibios habitan, que sean eficaces a largo plazo. Por desgracia, después de dos décadas investigando, aun no hemos sido capaces de desarrollar un método eficaz para combatir la quitridiomicosis en el medio natural aplicable a todos los hábitats.

En nuestro trabajo recién publicado en la revista Philosophical Transactions of the Royal Society B resumimos las medidas existentes para la mitigación de esta enfermedad en poblaciones salvajes, que se pueden resumir en:

1. Translocación/reintroducción: traslado de ejemplares a zonas menos favorables para el desarrollo de la enfermedad o liberación de individuos criados en cautividad para reforzar las poblaciones salvajes afectadas.

2. Bioaumentación: aportar o favorecer el desarrollo de bacterias que viven de manera natural en la piel de los anfibios y que son capaces de combatir al hongo patógeno.

3. Uso de antifúngicos: tratamiento de los individuos infectados y, alternativamente, desinfección adicional del medio. Lamentablemente este método combinado solo podría ser eficaz en comunidades de anfibios simples y con ciertas características.

Tras estos años de ensayos, parece que un solo método no sería suficiente para mitigar la enfermedad, siendo necesario combinar varios métodos de manera estratégica para obtener los resultados deseados. Aunque nuestro conocimiento de la dinámica entre hospedador y patógeno se ha ampliado en los últimos años, aún sigue siendo necesaria la investigación básica en laboratorio. Esperemos que en un futuro podamos desarrollar un método definitivo para terminar con esta enfermedad y, mientras tanto, continuaremos aplicando las medidas disponibles en la actualidad para evitar que desaparezcan estos animales.

https://www.youtube.com/watch?v=-pSxZj7PLzk