Tritones alpinos en Guadarrama y otros forasteros

Ya está disponible el número especial del boletín de la Asociación Herpetológica Española sobre introducciones de especies anfibios y reptiles en España. En este número hemos publicado un artículo sobre la introducción y expansión reciente del tritón alpino (Mesotriton alpestris) en Peñalara.

Como probablemente sabréis, el tritón alpino se distribuye de forma natural por gran parte de Europa, llegando hasta la Península Ibérica donde ocupa gran parte de la Cornisa Cantábrica. La especie falta en casi toda la península, aunque hace años fue citado en el Sistema Central, probablemente al ser confundido con el tritón ibérico por su vientre rojizo.

A mediados de los 80, aparecieron en Peñalara un par de ejemplares de forma sorprendente, sin que Mario García País y otros formidables herpetólogos que trabajaban en la zona habitualmente lo hubiesen detectado con anterioridad. Desde entonces, el tritón alpino no ha dejado de expandirse por Peñalara, ocupando, año tras año, más y más charcas desde su probable lugar de introducción. Ahora, nuestros análisis genéticos, y al igual que otros realizados anteriormente con técnicas más antiguas, confirman el carácter introducido del tritón alpino en Peñalara. Aunque nos ha resultado imposible concretar el origen preciso de los ejemplares introducidos, los tritones de Peñalara son muy similares genéticamente a los de las poblaciones asturianas del Lago Ercina y los Pozos de Lloroza en Picos de Europa.

Las consecuencias de la introducción del tritón alpino en Peñalara son difíciles de evaluar en profundidad. Para empezar, siempre nos quedará la duda de si fue, precisamente esta introducción, la que motivó la entrada del hongo asesino en Peñalara desde el norte de España. Además, el tritón alpino compite con las especies de anfibios autóctonos de Peñalara y depreda sobre algunas de ellas, por ejemplo, sobre las larvas del escaso sapo partero. Asimismo, actualmente el tritón alpino actúa como reservorio y vector de la quitridiomicosis, y dificulta los trabajos de mitigación de la enfermedad.

El tritón alpino, de momento, no ha logrado reproducirse fuera del área conocida como Los Llanos de Peñalara, pero si llegase a colonizar enclaves como la Laguna Grande su eliminación sería realmente complicada. Por tanto, es hora de tomar medidas y controlar esta especie para que, al menos, su distribución en el Parque continúe siendo restringida.

En este último número del boletín de la AHE, también podéis encontrar un completo artículo titulado “Síntesis de las introducciones de anfibios y reptiles en España”, donde podéis conocer qué especies de herpetos introducidas existen en nuestro país y en qué zonas se encuentran. Según este trabajo, las islas Baleares han sufrido el mayor número de introducciones (18 especies), mientras que las islas Canarias presentan 5 especies introducidas y 6 han sido traslocadas entre islas. En la península han sido introducidas 9 especies, mayoritariamente en la costa y el sur. En general, todas estas introducciones han sido pasivas, y motivadas por el tráfico de mercancías. Entre las introducciones activas, la mayoría han ocurrido en épocas históricas, aunque también en los últimos 25 años.

Este artículo concluye que, entre otras medidas necesarias para prevenir nuevas introducciones y minimizar los impactos de las ya ocurridas, es necesario replantear las listas de especies protegidas e introducidas en los catálogos nacionales y autonómicos. Desde SOS Anfibios Guadarrama apoyamos este planteamiento, y el caso del tritón alpino en el Catálogo Regional de la Comunidad de Madrid es especialmente urgente para tomar medidas esenciales para la conservación de nuestra biodiversidad.