Haciendo de sapo partero padre

El cuidado parental de los machos de sapo partero supone una ventaja para la supervivencia de las puestas, ya que estos las cuidan durante los estadios tempranos del desarrollo, evitando su desecación, congelación, o la depredación por parte de otros organismos.

ExperimentoEsta característica, que resulta muy ventajosa en el medio natural es, en ocasiones, un inconveniente para la cría en cautividad de la especie en comparación con la mayoría de anfibios que, simplemente, depositan la puesta en el agua. Así, frecuentemente, los machos jóvenes no consiguen enrollar correctamente las puestas a sus patas, y estas se sueltan accidentalmente. Sin el contacto de la piel del macho, los huevos ya no reciben la protección natural de sus defensas, y terminan por morir por la acción de los hongos del ambiente.

Iris Calleja y Julia Catasús, alumnas del Máster de Ecología de la Universidad Autónoma y Universidad Complutense de Madrid, están llevando a cabo un experimento para ensayar diferentes técnicas que permitan completar el desarrollo de los huevos del sapo partero sin la presencia del macho. De esta forma, conseguiremos incrementar el número de ejemplares criados en cautividad y que serán liberados en el medio natural.

Los diferentes tratamientos ensayados comprenden el uso de distintos fungicidas y la radiación de luz ultravioleta, y los huevos se mantienen en un ambiente de elevada humedad y a una temperatura de 20ºC.

Si conseguimos desarrollar una técnica efectiva para sacar los huevos adelante, no solo podremos recuperar las puestas abandonadas por los machos jóvenes, sino que podremos incrementar la producción de ejemplares. En efecto, al retirar las puestas de los machos a los pocos días del apareamiento, estos continúan cantando y suelen conseguir nuevas puestas de otras hembras.

https://www.youtube.com/watch?v=47kEX9STkmo