¿Puede participar la cabra montés en la biodiversidad microscópica del Parque Nacional?

heces cabraSon varios los aspectos en los que la cabra montés se relaciona con el medio, posiblemente la interacción más detectable tenga que ver con el aprovechamiento directo de la vegetación. La cabra montés, mediante el consumo selectivo de las plantas, ayuda al incremento de algunas especies vegetales y provoca la desaparición de otras, generando comunidades vegetales específicas. Esta interacción resulta especialmente sensible en áreas con condiciones extremas para la vegetación como pueden ser las áreas alpinas y rupícolas.

En cualquier caso, esta interacción no se limita al aprovechamiento del recurso trófico de forma directa sino que se refleja en otros ámbitos. Por ejemplo, el establecimiento de comunidades de algunos microorganismos en localizaciones concretas suele ser otro aspecto importante, aunque poco conocido.

cabra bebiendoMuchos microorganismos que viven en el interior de los animales (bacterias, protistas: ciliados y flagelados parásitos, etc.) pueden salir al exterior cuando son expulsados con las heces. En muchos casos, utilizan formas de resistencia que se depositan en el suelo o la vegetación hasta que son consumidos por otros individuos. En otros casos, dichos microorganismos pueden acceder al ciclo del agua cuando las heces son depositadas directamente en un río (quién no ha visto al ganado defecar mientras abrevaban) o bien por lavado de la vegetación o el suelo durante la época de lluvias o durante el deshielo.

El acceso de estos microorganismos a los cursos de agua no es siempre directo. En algunas ocasiones son arrastrados a través de depósitos naturales de agua, como son las pilas graníticas de La Pedriza.

heces pilaComo hemos visto hace unos días en el blog, la propia singularidad de las pilas, capaces de acumular agua y materia orgánica, genera microhábitats de relevancia biológica que pueden ser sustancialmente diferentes a los presentes en otras formaciones naturales. Sin embargo, las peculiares características de ubicación de muchas pilas en las moles de granito, limitan su acceso a un número reducido de especies de animales, entre las que podemos encontrar aves, algunos pequeños carnívoros presentes en el Parque y especialmente la cabra montés, que utilizan las pilas graníticas de La Pedriza para descansar y desplazarse, aprovechándolas como abrevaderos naturales y provocando la acumulación de sus heces en estas formaciones. Cuando el exceso de agua presente en las pilas rebosa, parte de estos microorganismos son arrastrados hacia los cursos naturales de agua, siendo por tanto puntos de partida para su diseminación por el territorio y permitiendo su expansión natural.