Vocación vertical
Marcos González del Río
El motivo de escribir este artículo, se esconde detrás de una pregunta que recientemente me han planteado, ¿cómo un deportista acaba trabajando como “escalador de nidos”? Para poder dar respuesta a esta cuestión, he necesitado reflexionar sobre como comencé mi relación con el deporte y el medio natural y en qué momento ambos mundos confluyeron en uno solo. Por otro lado, también he creído necesario contestar esta pregunta explicando cuál es mi labor en el Parque Nacional.
Trabajos de manejo de fauna en altura.
De algún modo siempre he estado vinculado a la montaña. Creo recordar que todo comenzó durante mi infancia, en aquellas largas tardes en las que acudía junto a mis amigos, a una charca cercana a nuestras casas. Allí nos pasábamos las horas observando toda clase de “bichos”. Pero la montaña guardaba para mí un descubrimiento diferente, el deporte. Y más adelante como por golpe del destino, encontré un reto que aunaba estas dos facetas, la medioambiental y la deportiva.
Mi curiosidad por el medio ambiente y la pasión por el deporte, fueron sin duda, los impulsores de la decisión que me llevó a comenzar mi carrera profesional como Guía de Montaña. Este oficio de carácter vocacional se desarrolla en el medio natural, hecho que favorece el disfrute por la naturaleza al estar en íntimo contacto con ella, generando así un especial interés por la conservación y protección. Quizás este cóctel sea el responsable de guiar mi camino, y conducirme a desarrollar mi profesión como Técnico de Montaña en un Espacio Natural Protegido.
Mi trabajo se sitúa en el área de uso público y las labores que ejerzo son mayoritariamente de apoyo a la gestión. Una característica destacable de mi trabajo es el nexo común de los proyectos en los que participo: el deporte, la conservación y la protección del medio natural.
Algunos ejemplos de mi labor, se pueden encontrar en el apoyo a la redacción y elaboración de normativa como el Plan Rector de Uso y Gestión del Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama (PRUG), el cartografiado mediante técnicas GIS-GPS (técnica que combina aplicaciones de Sistemas de Información Geográfica con receptores satelitales) de la red de itinerarios del Parque, la supervisión, control y evaluación de pruebas y competiciones deportivas que se celebran en el territorio o la coordinación del Plan de Regulación del Uso Público para la Protección de aves Rupícolas (PRUPPAR), el cual tiene por objeto la protección de las especies rupícolas durante su época de cría y reproducción, compatibilizando la conservación con diferentes prácticas derivadas del uso público, de forma que puedan seguir efectuándose con las regulaciones necesarias que contribuyan a la protección de dichas especies.
Posadero de buitre leonado (Gyps fulvus). Autor: Marcos González del Río.
Otro ejemplo de mi labor en el Parque Nacional, son las colaboraciones esporádicas que se efectúan dando apoyo a distintos órganos de investigación, como en el proyecto Aequilibrium del grupo Tagonius, quién realiza un seguimiento y estudio del águila real mediterránea (Aquila chrysaetos homeyeri) en España, u otras colaboraciones puntuales, como con el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), en sus estudios sobre el alimoche común (Neophron percnopterus).
Dentro de este tipo colaboraciones mi función es dar apoyo a los operativos de investigación, como especialista en trabajos en altura en el medio natural y manejo de fauna en altura, facilitando la llegada de los investigadores a lugares de difícil acceso, en los cuales es necesario el empleo de cuerdas y equipos de protección individual tales como cascos y arneses para poder alcanzar las zonas de estudio y garantizar el máximo de seguridad posible en todo momento, o trasladando fauna mediante dispositivos de transporte seguro, para trabajos como el de toma de muestras. En estos operativos también se colabora con el cuerpo de Agentes Forestales (Comunidad de Madrid) o Agentes Medioambientales (Castilla y León), quienes aportan personal de su unidad de trabajos verticales especializada en trabajos en altura en el medio natural, además llevan a cabo el trabajo administrativo en el cual se levantan las actas del operativo.
Tras esta presentación de mi labor en el Parque y tratar de responder a la pregunta que me habían formulado, tan solo me queda aportar como conclusión, una reflexión personal:
“Sin lugar a dudas, cuando me paro a pensar cómo ha evolucionado mi carrera profesional, no dejo de agradecer al destino la oportunidad de aportar mi granito de arena, en algo tan valioso como es la protección y conservación del medio natural, y de alguna manera, poder devolver a la Sierra de Guadarrama todo lo que me ha aportado, me aporta y (estoy seguro) me aportará.”
Marcos González del Río
Técnico de Montaña (TRAGSA)
Centros de Visitantes del Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama